Volar

Aún estás a tiempo muchacha
de perderte en los montes
de tus propias palabras
subir a la cima
y volar

Fútbol

Es deber del mundo saber
que jugar al fútbol
bajo lluvia de verano
es lo más parecido
a la revolución.

Los seres urbanos
inexpertos en el hecho
no podrán nunca
cambiar el estado
de las cosas.

Chicas

Por las calles andan
los carritos tirados por caballos
con sus ocupantes
a bordo.

Unos esperan el
semáforo en verde;
otros chiflan, gritan
y cantan odas
a esas dos flores.

Flores
salidas de sus tierras
a conquistar pajaritos.

Poetas en un domingo de Paraná, luego de algunas hazañas y camino a futuras conquistas

Allí van, allí marchan los poetas
de las fantasías urbanas. Son apenas tres:
el joven Heer, el supremo Durand
y el maestro Juancito Desiderio.
Parecen un ejército libertador;
van remando las siestas vacías de Paraná.
Como inmensas montañas me enfrentan,
me interrogan, me tientan, me saludan
y se marchan y se escapan y desaparecen.
Antes, los guío en su travesía.
Sus espectros se esconden tras el horizonte.
Si los he visto, no recuerdo.

Chica beatle

ella canta una canción
creo que es de los beatles
últimamente escucha
a los pibes de liberpool
y también oye temas
de chico buarque
a ella se la ve contenta
yo creo que es porque
todas las mañanas
me levanto a su lado

Fantasías

En las profundidas de la tierra uruguaya vivió 11 años Mauricio Rosencof, el poeta de las fantasías y de los espantos humanos. Una década en celdas de dos metros sumergidas en la profundidades de las cárceles.
Rosencof se la pasó recordando historias viejas, cuentos de amor, canciones de esperanzas. Imaginando poemas.
Junto al Ñato Fernández Huidobro, don Mauricio inventó una forma de comunicación mediante golpes en la pared. Un golpecito, dos, tres. La primera palabra que se dijeron fue "felicidades", cuando nacía un nuevo año, allá por los años setentistas de dictadura en el Uruguauy.
Mediante golpes, se contaron las historias de sus vidas, confesaron amores y tramaron revoluciones.
Nunca antes nadie había mostrado tanto amor propio. Ante los abismos de la muerte, aparecían los recuerdos que daban un poco más de vida.
Fundación de las palabras: Don Rosencof escribió la historia de amor La Margarita en hojas para cigarrillos que salían al exterior en las ropas que iba a ser lavadas por familiares de los presos:

-Bajó sus pétalos mi Margarita...
y deje en sus labios un beso aún latente...

Los versos fueron escritos con la punta de una birome que Mauricio intercambió por cartas de amor, escritas por él, a pedido de los guardias de la cárcel.

-La fantasía forma parte de la realidad. Un individuo sin fantasía es una vaca -comprobó ya en años de libertad.

Los sonetos de Ricardo W. Viera

A continuación, reproducimos un soneto de Ricardo W. Viera, el poeta maldito de las noches de Montevideo.


chica de concordia en el lago te ví
tus perfectas flores me atraparon
tus potentes labios me deslumbraron
aunque te fuiste igual te perseguí
entre las tibias aguas te metiste
y contigo bañaste tus bellezas
esas dos que se mueven bien inmenzas
y con tu mirada algo me dijiste
al salir con un ojo me guiñaste
entonces te imaginé en un fuego
rodeada toda entera por mi ego
al principio pensé que me mentiste
mas no fue así por la noche llegaste
a mi sueño viniste y allí te quedaste

www.canchas.org